lunes, 24 de diciembre de 2012

Siete tips para que el pavo te salga perfecto

Hornear el pavo de Navidad es todo un arte que requiere tiempo y principalmente técnica. Si tú serás quien se encargue de esta tarea, aquí te damos algunos tips para que este te quede perfecto. Toma nota.


1. Antes de meterlo al horno, ten en cuenta que el pavo debe estar completamente descongelado. Luego límpialo. Retira primero toda la menudencia. Enjuágalo con agua fría y sécalo por dentro y por fuera con papel toalla, recomienda el portal de Martha Stewart.

2. Aunque cocer el relleno dentro del pavo puede hacer que este quede más sabroso y húmedo, se corre el riesgo de exponerlo a bacterias, lo que podría derivar en enfermedades como la salmonela. Mejor cocina el relleno aparte, en una cacerola untada con mantequilla. Cubre la preparación con un papel de aluminio y de vez en cuando rocíala con los jugos del pavo. Requerirás aproximadamente una hora.

3. Hornea el pavo a 200 C°. Según Huffington Post esta temperatura es ideal para asegurar una cocción uniforme y conseguir que la piel quede crocante y la carne tierna. El ave ha de cocinarse de 3 a 6 horas, dependiendo de su tamaño. (Aquí encontrarás una tabla con los tiempos de cocción indicados de acuerdo al tamaño del pavo)

4. Después de la primera hora, rocía el pavo a menudo con las gotas que caigan en la fuente en la que este se está asando. Esto permitirá que se mantenga húmedo y le dará a su piel un color uniforme.

5. Se recomienda utilizar un termómetro especial para medir la temperatura de la carne. Si es así, el pavo estará listo cuando la carne alcance los 73 C° (165 F°). Has la medición en la parte más carnosa de la pechuga.

6. Por otro lado, Huffington Post aconseja no zurcir el pavo, cuestión que hará que la piel quede floja, demasiado húmeda y que el sabor no sea el mismo. Asimismo, engrasarlo todo por dentro y por fuera no siempre es una buena idea. Sin embargo, cubrirlo con mantequilla, sal y finas hierbas podría incrementar su sabor.

7. Antes de retirar el ave del horno, deja que repose allí (con el horno apagado) por unos 20 minutos. “Esto permitirá que la humedad se quede donde tiene que estar: en la carne”, indica Huffington Post. Por su parte, Martha Stewart aconseja antes de cortarlo, este descanse al menos por 30 minutos fuera del horno, pero cubierto en papel aluminio.

Fuente: El Comercio